Una de cada 14 personas en el planeta, es decir unas 500 millones de almas usan para interactuar un invento que nació de un desplante: la red social Facebook. Trabajo, amistades, voyeurismo, imágenes, videos y diversión van juntas de la mano en una suerte de realidad paralela y enteramente virtual, sometida a la tiranía del “me gusta” y “quiere ser tu amigo”.
El sitio es un directorio de la gente del mundo y el lugar para crear identidades públicas. Tiene más 500 millones de registrados, de los cuales 179 millones son amigos de su creador. El sistema, inscripto en la denominada web 2.0 está valuado en una suma estimada entre 16 mil y 22 mil millones de dólares. Aunque se trata de especulaciones puesto que la compañía creada por Mark Zuckerberg no está en venta.
EL ORIGEN
Una noche de 2004, Mark Zuckerberg, junto a sus compañeros de estudios, Dustin Moskovitz y Chris Hughes, y luego de haber sufrido un rechazo de una compañera, tomó el directorio de alumnos de la universidad (Facebook en inglés) y lo publicó, eliminando a los hombres y dejando solo a las mujeres. Quienes entraban a esa red podían calificar y describir a las chicas en una suerte de catálogo sexual.
Esto llevó a que el Departamento de Servicios Informáticos de Harvard levantara con él cargos como infringimiento de la seguridad informática y violación de las políticas de privacidad y de propiedad intelectual.
Harvard insistió en que el joven Zuckerberg había hackeado el sistema Internet de la universidad para alterar imágenes de los estudiantes sin autorización y para su propio beneficio. Si bien no se conoció nunca la resolución universitaria, Zuckerberg abandonó, un año más tarde, sus estudios y se dedicó al proyecto Facebook.
El desarrollo de Facebook, además de la motivación sexual de su creador tiene otros componentes y antecedentes. Zuckerberg, antes de llegar a Harvard, ya era considerado una especie de genio de la programación con varios programas en su haber. Desde sistemas de intercomunicación para un consultorio (prototipo de AOL) hasta programas como el Coursemacht, que permitía a los estudiantes ver la lista de otros compañeros de clase, Synapse, un prototipo de inteligencia artificial para seguir temas musicales de usuarios o el calificador de páginas de Internet Facemash.com. Todos estos desarrollos fueron los primeros esbozos de la web 2.0 en medio de una fiebre de las puntocom.
En medio de esos comienzos algunos gigantes del rubro informático como Yahoo! quisieron comprar Facebook, pero Zuckerberg bajo la premisa de “es mi bebé y quiero verlo crecer” rechazó todo. Tenía tan sólo 22 años!
Fuente: www.lmneuquen.com.ar
Atentamente,
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